Los datos se extraen del informe sobre demanda del turismo del vino realizado por ACEVIN
La Asociación Española de Ciudades del Vino (ACEVIN) ha hecho público el noveno Informe sobre la Demanda del Turismo del Vino, realizado a través del Observatorio Turístico de las Rutas del Vino de España en el que dibuja el perfil del enoturista en nuestro país, analizando motivaciones de viaje, organización, destinos elegidos y perfil sociodemográfico en un trabajo de análisid de datos relativos al segundo semestre de 2017 y el primero de 2018.
A partir de este análisis el informe revela que el perfil del enoturista en nuestro país no ha cambiado sustancialmente, continúan predominando ligeramente las mujeres (55,3%) sobre los hombres (44,7%) con edades comprendidas entre los 46 y los 65 años aunque crece el número de personas de entre 36 y 45 años que visitan las Rutas del Vino (38,2%) así como los de 18 a 25 años que también ha experimentado un aumento, pasado del 4,8% al 6,9%.
Lo que sí llama la atención es el incremento del gasto medio de este tipo de viajero, que también aumenta sus pernoctas en el destino elegido. Así, el gasto medio del turista del vino se sitúa en 161,9 euros por persona y día (frente a los 156,6 del informe precedente). Cabe destacar que este dato del gasto medio es superior al gasto del turista general extranjero (147 euros, según el último informe) y al del turista nacional dentro de España (45,34 euros, según informe 2017 FAMILITUR).
El 58,78% de los encuestados, que principalmente viajan en pareja y con amigos o compañero de trabajo, han pernoctado en el destino, aunque baja el tiempo que pasan en él, pasando de los 2,54 días que arrojaba el anterior informe a los 2,43 días que presenta el actual, lo que deja un margen de mejora en el desarrollo de propuestas y actividades que animen al turista a alargar su estancia.
Crece el alojamiento en el rural y las reservas a través de internet
En cuanto al tipo de alojamiento preferido por los enoturistas, los hoteles de cuatro estrellas siguen siendo la modalidad con más aceptación. Se observa también un aumento en el porcentaje de los alojamientos de turismo rural, que ya son elegidos por el 19% de los viajeros. De hecho, por primera vez, se sitúan en la segunda posición, por delante del la opción de los hoteles de tres estrellas. Este dato indica que cada vez se valoran más aspectos como el contacto con el medio y la cercanía que suelen ofrecer este tipo de alojamientos.
Entre las novedades que aporta el estudio también destaca los cambios en las formas de reservar el viaje y las actividades. El nuevo estudio resalta que un 53,5% de los enoturistas han efectuado sus reservas a través de Internet, lo que supone un crecimiento de más de un 2% de este canal. Además, un 80% de los enoturistas han resevado algún servicio antes de su viaje, normalmente visita de bodegas (86,8%) se consolida como la atracción principal, disfrute de la gastronomía local (56,8%) y la degustación de vinos (54,4%). Experimenta un notable ascenso las visitas a los municipios vitivinícolas (del 31,7% al 48,8%), lo que pone de manifiesto el interés creciente de los enoturistas por descubrir el patrimonio de nuestros pueblos, más allá de las bodegas.
Se incrementa, además, la fidelización por este tipo de turista que valora muy positivamente su experiencia, el 99,6% recomendaría el viaje y el 56,1% de los encuestados afirma haber visitado anteriormente alguna otra Ruta del Vino, un 3,5% más que en el informe anterior. Llama la atención, además, que el 30,6% de los enoturistas encuestados manifiesta su interés por conocer la Ruta del Vino Rías Baixas, la única gallega certificada bajo la marca Rutas del Vino de España, lo que la sitúa como la segunda ruta más mencionada por los enoturistas encuestados sobre sus próximos destinos, solo superada por la de la Ribera del Duero y por delante de la Rioja Alta, Rioja Alavesa, Bierzo o Rueda.